domingo, 3 de mayo de 2020

POEMAS / MANUEL DE REGLA BAEZ




Perdón corazón enamorado

¿Cómo puede un corazón enamorado
 amar más, cuando todo lo ha entregado?
¿Cómo puede un corazón enamorado
saber cuándo es reciproco
el amor que embarga al ser amado?

¿Cómo puede saber un corazón enamorado
olvidar una traición
cuando mil veces ha perdonado?
Nada como un latido, un suspiro,
una sensación de que todo ha terminado.

¿Querer  acabar en un segundo,
lo que tanto tiempo y sacrificio ha costado?
No, vale más una vida tranquila
que mil y una noches de jolgorio, desolado.


Te pido perdón, perdón, perdón.

Y me vi montado en las alas del mundo,
en el inmenso cielo azul, muy arriba, muy arriba
por encima del majestuoso mar profundo.

Y sentí mi corazón latir como nunca
con lastre y desesperanza, de un cuerpo sin alma,
vagando solo sin refugio.

Y sin ti, mi vida es vana
mi corazón, mi mente, mi cuerpo
claman por ti, por tu templanza,
nada hay más importante que tú.

Y mi ser te pide perdón por no entender
que este tonto es un loco que sin tu amor
no tiene nada en este mundo,
ni riqueza que me pertenezca
si no estás en mi existir.

Y con la tristeza de un loco arrepentido,
de puro amor,
te pido perdón, perdón, perdón,
con todo mi corazón.
Te pido perdón, perdón, perdón,
por hacerte sufrir tanto, sin razón.
Te pido perdón, perdón, perdón.


La juventud de ayer, hoy y siempre.

La juventud es irreverente
solo con nacerle un pelo,
así sea en la frente,
ya para el pechito… no, no, no
esto esta fuerte, fuerte.

La juventud es pasajera,
A mil se monta en to,
ya sea en motoconcho, en carro público,
en tren, en avión,
no importa que la muerte sea su misión..

La juventud no para bola a na,
andan arrancao,
 ma pelao que una caja de arenque,
no le importa salir a la hora que sea
con tal de tar en el can pa bebe ron na má
y si fuman juca dicen, que no ajuma
que no es como el cigarrillo
 ni se ponen negros los dientes.

La juventud se va rápido
si tienes con que gastar pa dar cheles
pero, ah Dios mío no así
si estás ma pelao que un billete.

La juventud divino tesoro
te vas para no volver a verte,
me pasas por el lado,
ni palla vua mira
sigue tu camino y vete.

Ah la juventud de irreverente
pasajera como ella sola
no le para bola a ná
sinvergüenza será el que
no la disfruta, y se la pasa
en travesías días y noches,
pa ma fuerte estar.

La juventud de ayer,
la de hoy, mañana y siempre
vivir la vida es su norte,
no espera que la inviten,
se arroja a los brazos
del destino en busca de más suerte.
A lo que agarre mi bon,
se monta así sea en un carrito
de caja e bolas para echar vainas
y andar de sol a sol,
y de campana a campana.

La juventud de hoy
la viviría sólo si volviéramos
a tenerla para vivirla como la vivimos
como si pudiéramos repetirla
quedándonos con la experiencia
y el conocimiento adquirido.

Solo así me gustaría,
diferente mejor me quedo
con lo hasta ahora vivido
pues no hace falta una raya más
en mi pelaje largo y tendido.

De tigre sólo tengo el celaje,
los dientes los dejé en las calles
y la piel no se destiñe por más que la lave.
La juventud de ayer, de hoy, y de siempre
será la misma no hay quien la cambie,
ni quien la ponga bajo llave.

MANUEL DE REGLA BAEZ MATOS. Oriundo de Estebanía. Azua  (1968). Se muda con su familia a San Cristóbal (1976) y desde el 2004 reside en New York. Graduado en General Accounting. Monroe College. Magna Cum Laude. 2015/2016. Accounting and Finances. TCI College of Technology.  Cum Laude. 2012/2014. Facilities Management Tecnhnology. TCI College of Technology. 2010/2012.

No hay comentarios:

Publicar un comentario