domingo, 6 de julio de 2014

LAS ESTATUAS DERRIBADAS




Ligia Minaya

Es una novela que nos va llevando, paso a paso, por caminos que quizás hace tiempo no recordamos. Una tragedia, una locura, una arbitrariedad, asesinos, calieses, dictador, poemas, cantos, música, historias de un pasado, envuelven con la mano del escritor de San Cristóbal, Diógenes Valdez, una etapa de la vida dominicana y puertorriqueña que nos toca a todos el corazón. Julia de Burgos, poeta famosa y muy querida, cuenta su historia, sus dolores, sus deseos, sus amores, sus penas y entra en su mundo sus poemas sublimes, históricos y preciosos. El manicomio de Nigua abre sus puertas al famoso cantante Eduardo Brito y lo encierra en un lugar donde los locos son muy locos y otros son señalados por la dictadura como políticos-locos.

Entre un lugar hermoso como Puerto Rico, pero la pobreza de Julia, y en el asqueroso manicomio de Nigua donde sobreviven y otros mueren por enfermedades o torturas, el escritor de esta bella novela va contando casos, episodios, un tanto dolorosos los más y otro tanto inquietante los otros. También está presente la figura del dictador Trujillo. Así, al leerla, se va entrando en lugares y situaciones, unos concretos, otros por donde quiere el novelista que vayamos y otros más por donde va pasando nuestra mente al leerla. La novela tiene su estilo propio, como bien escribe poemas, cuentos, ensayos y novelas este autor, Premio Nacional de Literatura 2005.

Es que cada escritor escribe y relata a su modo y con su manera de ver y apreciar las cosas, un pasado, un presente y también un futuro. Por eso, leer con calma y por separado, cada libro, nos lleva a ir por mundos diferentes, a disfrutarlos, a sonreír, a pensar, y hasta a llorar junto a cada capítulo leído. No se puede negar que hay también "inventos" sabrosos que dejan a la imaginación en un suspiro. Leer una novela como esta es un regalo del cielo.
Escribir, hasta una carta (que ya no se escriben como años atrás) es a veces un delirio, otras veces un afán, alguna vez un problema que hay que ir solucionado poco a poco, y muchas veces es un don de la naturaleza que tiene quien escribe aunque sea un párrafo, un cuento breve, una pequeña novela y hasta dime que yo te diré.

Aquí, en esta novela, Julia de Burgos, sufre los efectos de la Guerra Mundial, pero también hay momentos alegres de esa exquisita mujer. Eduardo Brito pierde la paz, su voz, su memoria, sus canciones, y, sin embargo, permanece en la memoria dominicana como lo que fue, lo que ha sido y lo que continúa siendo: Un ejemplo. Por lo cual Diógenes Valdez, cuenta como Las Estatuas Derribadas, continúan presente, con vida, con buenos recuerdos. Nadie puede borrar estos recuerdos. Nadie puede dejar a un lado las estatuas derribadas cuando son la vida y el pasado de los famosos. Nadie puede olvidar a los contrarios a la dictadura que vivieron hasta su muerte en el asqueroso manicomio de Nigua. Por eso esta novela es para que no olvidemos nuestra historia.

Punto y aparte: Estoy aquí, disfrutando de RD, mi patria querida.


Diariolibre.com. Saudades|05 jul 2014

MUSEO DE SACAPUNTAS EN EL INSTITUTO POLITECNICO LOYOLA. SAN CRISTOBAL.


María Mencia Catalina Renville Santos nació en la ciudad de San Cristóbal, el 30 de Diciembre de 1916 hija del munícipe Pedro C. Renville Brito y su esposa Mercedes María de los Santos desde muy temprana edad tuvo un espíritu muy dinamice practicando en sus años de adolescencia y juventud el ciclismo, la natación y el volibol, formando parte del grupo “Encanto Femenino”, que viajo por varias ciudades del país poniendo en alto el deporte nacional.

Miembro fundador y directivo del Patronato de educación especial de Rehabilitación en San Cristóbal, institución que en 1975 fundó una Escuela para niños retardados mentales, la cual funciona eficientemente en esta ciudad, gracia al amor desinteresado de personas como la profesora Mencia renville que dedica la mayor aporte de su tiempo, en esta ardua labor en bien de su comunidad.
Profesora durante 10 años en la Escuela Juan Pablo Pina de San Cristóbal.

Maestra fundadora del Instituto Politécnico Loyola de San Cristóbal donde paso a ser profesora desde 1952 (periodo de su instalación) hasta 1982, o sea treinta (30años, donde trabajo con ahínco, dedicación, a ciencia, perseverancia y mucho amor siendo recordada y admirada por todos sus alumnos y personas que tuvieron la dicha de recibir su enseñanza y compartir con ese ser tan extraordinario.

Ha recibido muchas placas de reconocimiento entre las que podemos enunciar:
Reconocimiento del Patronato Cultural de Sna cristobal en 1987.
Socia Honorifica de la Cámara de Comercio y producción de San Cristóbal en 1993.
Reconocimiento de la Asociación Dominicana de Rehabilitación en San crstobal en 1995.
Reconocimiento por la Direcion Regional de Educación de San Cristóbal en el 2002.
Es declarada hija destacada de San Cristóbal en el 2002 por la Gobernación Provincial de san Cristóbal.
Recibió el 30 de junio de 2002, como premio un busto de Salome Ureña de Henríquez y diploma que es la mayor distinción y galardón que otorga el Ministerio de Educación a los Maestros distinguidos, la cual ostentan muy pocos profesores del país.


María Mencía Catalina Renville Santos comenzó el 25 de marzo de 1959, una colección de Sacapuntas que hoy cuenta con 2316 piezas; por su originalidad, curiosidad y colorido impresionante es visitada por cientos de personas nacionales y extranjeras, siendo la única en su género en el área del Caribe.


El 18 de febrero del 2011 en el marco de la celebración del día del Estudiante, la Gobernación Provincial de San Cristóbal, el Ayuntamiento del Municipio de San Cristóbal, el Ministerio de Cultura y el Ministerio de Turismo, declararon la colección de Sacapuntas cono Atractivo Cultural de la provincia de San Cristóbal, develando una tarja en la Casa de la Familia Renvile.


Vivió recibiendo la gran satisfacción de un deber cumplido que fue la formación de os niños que hoy componen las generaciones que ocupan altos puestos en la nación e instituciones fuera del país. Su legado está vivo en cada uno de sus alumnos, hijos y nietos.

Fallece en la  ciudad de San Cristóbal el día 12 de abril de 2013 q los 96 años. EN agosto del mismo año la colección de sacapuntas fue reinstalada en el Instituto Politécnico Loyola, donde podrá ser disfrutada por las futuras generaciones, como la profesora Mencía siempre quiso.


El Instituto Politécnico Loyola (IPL) es una Ciudad Educativa, estatal y sin fines de lucro, que inspirada en la experiencia educativa de la Compañía de Jesús-Jesuitas-orientada según los criterios de la Pedagogía Ignaciana, forma personas comprometidas con el desarrollo humano, económico y tecnológico de Republica Dominicana. Fue fundado el 28 de octubre de 1952 y mediante un acuerdo firmado por el Estado dominicano  fue confiado a los Jesuitas.

El publico meta del IPL son personas que no tienen acceso a una educación de calidad.

En nuestra casa de estudios recibimos a personas de todo el país, aunque su mayor incidencia se concentraba en Santo Domingo y la región Sur del país.

La ciudad Educativa Loyola cuenta con un sistema único de duración que permite al alumno ir desde preescolar hasta los estudios universitarios.Contamos con la escuela Básica Loyola, La Escuela de Idiomas Loyola, el programa Infotep –Loyola deEducación continuada, la Escuela Media politécnico Loyola y el Instituto Especializado de estudios Superiores Loyola. Hoy día, con más de 60 años de servicios educativos tenemos confianza plena en las personas y en nuestra metodología de trabajo que busca la educación integral en un ambiente de aprendizaje, trabajo en equipo y excelencia académica. Combinados estos programas dan como resultado la excelencia humana y profesional que es continuamente reconocida por al sociedad Dominicana. Tanto los empresarios como las instituciones receptoras de nuestros egresados han confirmado a lo largo de estas seis décadas el valor humano y profesional de nuestros egresados.











APOLOGIA A VIRGILIO GOMEZ SUARDI (VILLO)




Agustín Perozo Barinas

He leído con sumo interés una serie de artículos sobre el comandante Caamaño en las dos últimas semanas en varios medios impresos. 

Fui amigo personal y asistente de Virgilio Gómez Suardí (Villo, con su seudónimo de guerra 'Mario') desde 1985 hasta 1997. De estos años, una década en la ciudad de Nueva York.

No con sorpresa leo los severos hechos que se inculpan a Villo durante su presencia en Cuba al lado de Caamaño, como si este último, líder de la Revolución del 65, fuera un niño incapaz de pensar y tomar decisiones por sí mismo. 

Villo no tenía ese poder de intriga ni convencimiento sobre Caamaño y sí conocía sobre la incapacidad de los grupos de apoyo (políticos o armados) para consolidar los planes de la expedición, una vez el desembarco (o desembarcos) se realizara(n).

Se intentó abortar esta empresa, lo que ya Villo consideraba una aventura, intentando salvar la vida de Caamaño y sus compañeros. En República Dominicana no existían condiciones, ni rurales ni urbanas, para detonar una insurrección como la que se pretendía en 1973. 

Villo no era iluso, ingenuo, soñador, idealista ni nada por el estilo. Su trayectoria en los movimientos de izquierda que enfrentaron a los doce años del balaguerato es conocida, aunque no del todo, y ha sido objeto de adulteraciones y manejos acomodaticios. 

Sobre los crímenes de La Conquista en este continente, responden los españoles: "Fue culpa del Tiempo y no de España". De la misma manera Villo vivió su tiempo y no fue ajeno ni pasivo a aquellas realidades. 

Tomó las riendas de sus responsabilidades políticas en su momento y ejerció su derecho de cumplir su rol, lo cual hizo con coraje. A tal punto que, años después, seguía recorriendo las calles de su amado Santo Domingo solo, sin temores ni remordimientos. Que en paz descanse!