domingo, 8 de diciembre de 2013

EL ORIGEN DE LA ABSTRACCION



Carmen Rocamora

La Historia del Arte se sitúa a Kandinsky como pionero de la abstracción, entre los años 1909 y 1912. El soporte filosófico-cultural del momento, buscaba una base común, para los diferentes conocimientos. En el plano científico se acaba de descubrir la desintegración del átomo. En el mundo de la música, Shonberg había roto con la armonía tradicional, liberando el sonido del orden tímbrico y ofreciendo un lenguaje atonal, que recibió el n hombre del Método Dodecafónico. En el filosófico Woringer, explicaba la angustia del momento, como síntoma del desacuerdo entre el hombre moderno y la naturaleza, producto de la espiritualidad en la que el ser humano se refugiaba aterrorizado por el inmenso caos del panorama mundial.
Y es en este entorno, cuando la historiador del arte le resulta atractiva la desconexión de la pintura con la realidad, la primacía del color sobre la forma y la eliminación de las leyes de la perspectiva; una palabra, la aparición de la abstracción, considerando a Kandinsky como el gran creador de esta genialidad, en el mundo del arte.

La anécdota, inventada o real, servirá para cerrar el círculo de este planteamiento histórico. Se contaba que el pintor tenía la costumbre de recubrir el lienzo  con una tela blanca, mientras trabajaba en su elaboración. Un día, entrando en su estudio, al atardecer, vio que aquella tela, mancha de blancos, rojos, azules y amarillos, adheridos al azar, presentaba propiedades expresivas y estéticas por si mismas, sin que hubiese mediado un acto volitivo por parte del pintor. A partir de ese momento, Kandinsky tratara de explicar al mundo su visión sin perspectiva de la pintura y su anulación del principio de representación, proclamándose ante todos, como descubridor de la abstracción a través de sus libros titulados: “De lo espiritual en el arte”, “La pintura como arte puro”, y “el punto y la línea en el plano”.
Sin embargo  yo considero que la abstracción se había descubierto tiempo atrás, bajo presupuestos más vitales que teóricos, pues la historia teje sutiles argumentos, de manera que, al cabo de algún tiempo, la leyenda oscurece la verdad, y nuestra noción de algunos personajes corresponde más a la invención de un autor, que a la autentica realidad.
Hay que retroceder por el túnel del tiempo, para encontrar el verdadero nacimiento de la abstracción. Su origen está en Chelsea, Londres, y su creador, un Turner que próximo a la muerte, se instaló a vivir con la mrts Booth, su ama de llaves, en un pequeño apartamento, ocultando su verdadera identidad, y asumiendo para sus vecinos la personalidad de Mr. Booth.
Para el crítico Hazlitt, las obras desde este momento son “autenticas perspectivas aéreas”. Para la Literary Gazette, “sus cuadros, se diría que estaban hechos arrojando puñados de pintura sobre tela, donde se adherían al azar, sombreando a posteriori sus contornos”. Y para os demás contemporáneos, resultaba incomprensible que Turner tuviese que indicar como colocar sus cuadros en las exposiciones, para determinar dónde estaba la parte de arriba y donde la de abajo…

“La noche del diluvio”, “El paisaje con agua”, “El río y la bahía en la lejanía”, “La tempestad en el mar” y otros muchos lienzos mas, que decoran la Tate  Gallery de Londres, demuestran como decía Goethe en el Tratado de os colores, que el cromaticismo, sin necesidad de formas, produce en el ser humano una impresión particular, generada por las sensibilidades y la mirada, conjuntamente.

¿Qué mas justificaciones se necesitan para busca el origen de la abstracción?

Sin embargo, no había llegado el momento. La historia no estaba preparada para ello, ni el espectador podía comprender tanta audacia e invención.

La pintura de Turner fue duramente criticada, las revistas especializadas hablaban del caos que reinaba en sus cuadros, y lo confuso e sus temas fue objeto de desprecio e incomprensión.

Su principal crítico y amigo, Ruskin, considero que la vejez y la enfermedad denotaban una paleta con falta de precisión en el trazo, y que el exceso de alcohol había deteriorado su salud y su trabajo.

Turner no quiso que Ruskin viese sus últimos dibujos… éste, los seguía comprando sin el conocimiento de aquel.

 Por otro lado, Monet, anciano ya en el año 1914, se retira a su casa de Giverny, donde siguiendo la luz, se dispone a realizar su última serie, “La ninfeas”, que abre definitivamente para el mundo el camino ade la abstracción.

El maestro ya no ve, y por ello tiene que reinventar la realidad, extrayéndola de su propio sueño, inspirándose en el misterio de los espejismos que recuerda y evoca. La síntesis entre su ojo y su cerebro no existe ya, pero su valor poético subsiste, y así, sus telas convertidas en composiciones cada vez más informes, dan lugar a esta última serie, para algunos alejada de sus obras maestras del pasado; para mí, las más apasionadas del anciano de Giverny, en las que demuestra que la luz y el color, más allá de sus posibilidades figurativas, son una pura fantasmagoría lumínica, producto de las sensaciones que el artista siente ate la naturaleza…

El creador del impresionismo, al final de su vida, gracias a su incapacidad y a su ceguera, fue sin el saberlo, el creador de algo que iba a deslumbrar a la generación posterior, siendo la gran revolución del siglo XX… ¡nada menos que la abstracción! Colosal! lección de Monet, que consigue recrear su universo a través del recuerdo y de la memoria.

Sin embargo, La Historia del Arte, siempre recelosa ante todos los movimientos de vanguardia de este siglo, no estaba aún preparada para comprenderlo, y no aceptarlo.


Bellas Artes. Belart. No 46 Año 6.Madrid.

EN NAVIDAD APLIQUEMOS LAS BIENAVENTURANZAS



Marcial Báez

En este tiempo donde lo mundano con su aparatoso sistema capitalista distrae el verdadero sentido de lo que debería se la Navidad: celebrando que CRISTO nace en nosotros para vivirlo en todo el año litúrgico, profundizando en los personajes de Isaías, Juan el Bautista y la Virgen María, para tomar conciencia plena de que EL VIVE, les invito a que apliquemos las BIENAVENTURAZAS: las ocho bendiciones con que el Salvador dio principio al Sermón de la Montaña ( Mateo, 5 ) y cuya aplicación nos tiene asegurado el camino a la salvación :

Felices los pobres de espíritus, porque de ellos es el reino de los cielos.
Felices los mansos, porque poseerán la tierra.
Felices los que lloran, porque recibirán consuelo.
Felices los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
Felices los misericordiosos porque alcanzaran misericordia.
Felices  los que tienen el corazón puro, porque ellos verán a Dios.
Felices los que trabajan por la paz, porque serán reconocidos hijos de Dios.
Felices los que son perseguidos por causa del bien, porque de ellos es el reino de los cielos.

Raymundo Savard MSC, en una acertada explicación que hace de una de las mismas, nos presenta lo que muchos no quieren escuchar, donde la dejadez toma la delantera y la verdad desnuda retumba en nuestros oídos al  expresar que “somos haraganes. No nos gustan los esfuerzos prolongados. Buscamos soluciones fáciles. Quitamos la vida, engañamos, robamos en vez de buscar la unión y utilizar todas las fuerzas vivas de que pueda disponer la patria".

Es mucho más fácil robar y engañar que sentarse a conversar, más fácil que hacerle entender al otro que los bienes materiales tienen que ser útiles a todos los ciudadanos del país.

Es mucho más fácil quitar a una persona del medio que hacer los esfuerzos para que llegue a ser útil a la patria.

Es mucho más fácil cancelar a una persona que buscar la manera de entenderse con ella.

Es mucho mas fácil “ callar” a los que piden justicia que hacer justicia.

Es mucho más fácil amontonar riquezas que compartir con los demás.

Es mucho más fácil dar una limosna que pagar un salario justo. Más fácil organizar un baile  “ beneficio” que  ayudar a la gente a desenvolverse sola, sin ayuda paternalista.

Es mucho más fácil ponerse del lado de algunos fuertes y privilegiados que ayudar al gran número de los desfavorecidos.

Es mucho más fácil hablar de desarrollo que hacer que todos se liberen de ataduras que impiden ese desarrollo.

Es mucho mas fácil decir que el país progresa que trabajar para que el progreso llegue  a cada ciudadano.

Es mucho mas fácil hablar de orden y de paz que hacer los cambios que procuren la paz”.

Hagamos un esfuerzo, pensemos en nuestros semejantes para que unidos podamos llegar a Dios y El nos permita tener una comunidad mas progresista, donde los verdaderos valores morales y cristianos sean el estandarte de todos.


*El Periódico, San Cristóbal, R. D. Del 23 de diciembre al 10 de enero de 1996. Pág. 15.