lunes, 20 de julio de 2009

RUIDO Y PATRONALES EN SAN CRISTOBAL: El desorden como norma de operación de nuestras autoridades.


Por Luciano Frías

Como resultado de la presión que se generó en diversos sectores de nuestra sociedad en respuesta al desorden y falta de respeto que constituyeron las fiestas patronales del año pasado, las autoridades movieron la tarima de espectáculos y la venta masiva de bebidas alcohólicas a un lugar más "periférico": La Av. Libertad, frente al monumento a los Constituyentes. A menos de 100 metros del emplazamiento, se encuentra la clínica San Cristóbal.

Otra consecuencia fue que el Consejo Municipal tomara medidas al respecto. En este sentido cito parte de un artículo que publiqué en este mismo medio, el 30 de julio de dicho año, haciendo referencia a este acontecimiento:

Según informa un artículo periodístico aparecido ayer en la página 17 del diario "El Día", "el Concejo Municipal del cabildo sacristobalense emitió una resolución en la cual dispone la prohibición del cierre de calles, ingerir bebidas alcohólicas en las aceras, calles y espacios públicos, así como producir ruidos a través de la música en carros y altoparlantes".

El título del artículo es "Cabildo de SC rescatará los espacios públicos" y refiere una reunión que ha de celebrarse hoy en la sala de sesiones de la Sala Capitular. A la misma han sido convocados el jefe de la Policía Nacional, el gobernador, el fiscal y otras autoridades y tiene como fin "propiciar el cumplimiento estricto de las leyes y resoluciones".

No obstante, violando las disposiciones emitidas por la propia instancia municipal, el ayuntamiento ha concedido en más de una ocasión permiso para que un negocio de bebidas alcohólicas instale en el parque Piedras Vivas, recientemente remodelado y "rescatado" por la sindicatura actual, unas bocinas, una caseta y demás parafernalia. Actualmente dicha ocupación está vigente, me imagino que dentro del marco de la celebración de las fiestas patronales.

Justo a media cuadra vive Doña Solange Pereyra, profesora de música de varias generaciones, quien incluso ha sido objeto de reconocimientos por su labor en favor de la cultura, junto con su madre, Doña Gracita Barinas, de quien todos los habitantes de San Cristóbal de cierta edad conocen sus méritos y venerabilidad.

El asunto es que las bocinas que el ayuntamiento autorizó estuvieron produciendo música a niveles desbordados e ilegales de estridencia, alterando hasta la tortura la vida de todos los que vivimos en esa zona.

Es evidente que por motivos que no vienen al caso mencionar, pero que algunos deben intuir, el ayuntamiento incurre en una violación de sus propias disposiciones. Digo esto para no mencionar que el fenómeno que estoy denunciando es una violación a la dignidad de las personas y al derecho que todos tenemos a vivir en paz, aparte de que igual es un descarado atentado en contra de la salud.

Me gustaría que este mensaje le llegue al síndico y demás autoridades y empleados de la administración municipal y provincial. También que todos reflexionemos al respecto y analicemos las consecuencias que tendrá para nuestra comunidad a largo y mediano plazo la consolidación de este tipo de tendencias. Está en nuestras manos permitirlo indolentemente o hacer algo.

Le ruego a los que tengan la posibilidad hacer circular este mensaje y/o comentarlo.

1 comentario:

  1. La historia Dominicana ha sido cambiada, pero aun mas la de san cristobal... Hoy se celebran las fiesta patronales pero no igual que la demas hace 10 años atras.. ¿DONDE QUEDA EL ESÌRITU DE NUESTRO PATRON?

    ResponderEliminar