PRÓLOGOS
(Fragmentos).
Gente simple de mi aldea
es un conjunto de relatos y de acotaciones en el tiempo, sobre personajes
singulares de la comunidad de Sainagua, en la que están presentes mitos,
creencias, modos, maneras y peculiaridades con las que estos personajes
vivieron sus mundos con un dominio sorprendente en el arte de contar. Teddy Brito.
Se trata de la sociedad
de los ensalmadores y curanderos, que aunque con métodos poco científicos,
constituían saberes ancestrales que pasaban de generación en generación. Y
lejos de ser vistos por el doctor Martínez como recuerdos propios de sociedades
atrasadas, las reconoce como “método aplicados para resolver situaciones
relacionadas con el bienestar de las personas y las comunidades”. He aquí su
gran acierto como profesional de la medicina, como autor y como intelectual
agudo. Ramón Mesa.
Daniel Martínez es un
profesional de la medicina, la hermosa y positiva actividad humana que nos
identifica con el mandamiento cardinal de “amar al prójimo como a sí mismo” y
por esa actividad casi divina es que puede permitirse testimoniar sobre su
universo cercano, de la manera que lo hace, narrando vivencias humanas que le
acercan sin limitantes a su pasado. Chico
Despradel.
RAMÓN
GUILLÉN, EL VIEJITO RAMÓN (Fragmento)
El viejito Ramón, solo
debía tener unos 60 años, tamaño promedio; ya medio encorvado, pelo duro y
encanecido, mirada triste, pero con un corazón.
Su método de
trabajo(consulta), era muy peculiar, el enfermo podía presentarse personalmente
y llevar la orina en una botella o pote blanco o enviarla con un emisario, que
casi siempre era un familiar.
Al tomar en sus manos la muestra
cuando era enviada, preguntaba la edad y el sexo del usuario. La agitaba y
luego la dejaba descansar unos minutos y después salía al patio, ponía la
botella frente al sol, en alto; mirándola fijamente de un lado a otro.
La bajaba, colocaba el
frasco o botella sobre una mesita en la sala por varios minutos y repetía aquel
ritual en tres ocasiones.
Después procedía a
indicar los tratamientos según los problemas que había visto en la orina, que
normalmente eran brebajes preparados a base de hierbas y raíces recogidas en el
campo. Esas hierbas entre otras eran llamadas: Hierba Buena, Anamú, Apazote,
Romero, Albahaca, Pachulí, Raíces de Cabilma, Palo de Caja, etc.
Todo eso el viejo Ramón
lo hervía y agregaba azúcar crema, extracto de malta, vino tinto y un polvo
denominado Rivalbo. Era la misma medicina para todo, acompañado de su frase
famosa, “no te preocupe, que eso limpia”.
El viejo no tenía tarifa
fija para el cobro de honorarios, sino que ponía citas a los usuarios que
debían traer el pago o contribuían según fuera la evolución de su problema, de
tal manera que si mejoraba poco, pues el monto de su aporte también lo era.
¿Cuántos se curaron?, no
sabemos; ¿cuántos se complicaron?, no hay idea; de lo que si se tiene certeza
es de la pérdida de su credibilidad con el avance de la ciencia, de tal manera
que el pobre viejo Ramón murió en la pobreza.
Dr.
José Daniel Martínez Garcés. Médico, pediatra,
político, activista cultural y catedrático universitario.
Nació el 3 de enero de
1949 en la comunidad de Antonsí, Yamasá, perteneciente para la época a la
provincia de San Cristóbal. A los dos años fue traído a la tierra de sus padres
Mercedes Garcés y Salvador Martínez, Sainaguá.
Cursó los estudios
primarios en la escuela de su comunidad.; al ascender al segundo grado fue
inscrito en la escuela José María Alejandro Pichardo. Hizo el bachillerato en
Ciencias Naturales en el Liceo Secundario Manuel María Valencia. Se graduó de Médico
en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) en 1978, y de Pediatra en el
Hospital Infantil Dr. Robert Reid Cabral en 1981.
De niño fue inquieto,
activo, estudioso, amante de la cultura, la lectura y el deporte. participó
activamente en el movimiento clubístico de los años posteriores a la revuelta
de abril de 1965. Fue Secretario de Actas y Correspondencias del Club Flor de
la Juventud; presidente fundador del Club Sol Naciente de Sainaguá, desde el
cual desarrolló una amplia labor cultural y deportiva; Presidente del Comité
Organizador del Primer Festival de Atabales en 1975; Presidente del Club
Rotario de las Matas de Farfán y San Cristóbal.
Como profesional de la
salud ha tenido la oportunidad de desempeñar importantes funciones en los
hospitales Dr. Federico Armando Aybar como Jefe de Pediatría (1982-1987) y el
Hospital Regional Juan Pablo Pina de San Cristóbal (2002-2004).
Dr.
José Daniel Martínez Garcés. Gente simple de mi aldea. 95 páginas. Edición
Grupo Editorial Montaño. San Cristóbal. República Dominicana. 2020.
No hay comentarios:
Publicar un comentario