José M. Pichardo
Existe una variedad muy grande de colores, con sus degradaciones correspondientes, en los plumajes magníficos de los gallos de pelea, con algunas denominaciones típicas, según el país, de acuerdo con las mezclas y combinaciones de los colores y matices. Los mas comunes son los siguientes: colorado, negro, blanco, cenizo, gris , verde, amarillo, pardo castaño vivo, pardo negro, plateado, pardo púrpura, rojo oscuro caoba, gris muy oscuro, amarillo dorado brillante, blanco amarillento, verde dorado, negro con vivos violáceos y una infinidad de pintados.
Entre los colores y matizados que tienen denominaciones típicas los más conocidos son los siguientes:
INDIO. Colorado obscuro, que a veces es negro en la pechuga y varía de intensidad en el color dominante, y que se subdivide, según los diferentes matizados, en indio joco, indio cenizo, indio amarillo, etc.
El indio es el color más noble y preferible, la pinta, según dicen los galleros. En los indios han sobresalido muchos campeones famosos, y son , generalmente, gallos valerosos, agresivos, fogosos que no cejan nunca, ni se rinden fácilmente.
PINTO, FLOREADO. Es el matizado de diversos colores, principalmente en blanco y negro, y se distingue por el color dominante, como pinto negro, pinto blanco, pinto amarillo, etc. A cierto matiz de pinto negro le llaman “primavera”, lo mismo que a algunos pintos blancos le dicen “habichuela” o “afrijolados”.
MALATOBO. De color almagrado claro, con las alas mas obscuras y algunas plumas negras en la pechuga. Existe una variedad grande malatobos.
CANELO. Es el pintado en cenizo y blanco, cenizo y negro, y otras combinaciones de dos o más colores con un color donante.
GIRO. Es el matizado en amarillo o en blanco y negro, con distintas denominaciones asegura matices.
JABADO. De color blanco, pintado en pardo y amarillo o negro. Es la pinta mas desacreditada, porque supone un origen bastardo. Es raro encontrar un galo jabado valiente. Pero en los anales gallísticos nacionales figuran proezas realizadas por algunos jabados excepcionales, que han pasado a la posteridad.
TALISAYO. De color indio con plumas amarillas en las alas y el cuerpo, y negra la pechuga, con diversas variaciones. Es la pinta fatal, según creencia empírica muy arraigada.
GUACHARACO. Es una variedad del indio, rojizo, con manchas negras, tirando a guacamayo.
Los nombres de los colores matizados son distintos en algunos países. Por ejemplo, en Puerto rico a los indios les dicen rubios y camagüeyes a los canelos.
Hay pintados indefinidos, que la fantasía popular denomina caprichosamente, usando nombres supuestos, como “calandria”, “flor de caña”, “pájaro bobo”, y otros, que a veces no significan nada, y son mas bien motes.
Algunos gallos cambian el color de las plumas de un año para otro. Se han visto gallos completamente blancos tornarse negros, o viceversa, en el tiempo de la muda de las plumas. Entre los campesinos existe l acreencia de que esta transformación prodigiosa se realiza solamente en los gallos nacidos durante el mes de marzo, a los que llaman “marzales”. Pero se ha comprobado que este fenómeno tiene efecto en los galos de calidad absoluta, por lo que se cree que es una señal inequívoca de noble abolengo. Ningún gallo manilo cambia el color de la pluma, y nunca se ha visto huir en la pelea a un gallo “marzal”.
Existe una variedad muy grande de colores, con sus degradaciones correspondientes, en los plumajes magníficos de los gallos de pelea, con algunas denominaciones típicas, según el país, de acuerdo con las mezclas y combinaciones de los colores y matices. Los mas comunes son los siguientes: colorado, negro, blanco, cenizo, gris , verde, amarillo, pardo castaño vivo, pardo negro, plateado, pardo púrpura, rojo oscuro caoba, gris muy oscuro, amarillo dorado brillante, blanco amarillento, verde dorado, negro con vivos violáceos y una infinidad de pintados.
Entre los colores y matizados que tienen denominaciones típicas los más conocidos son los siguientes:
INDIO. Colorado obscuro, que a veces es negro en la pechuga y varía de intensidad en el color dominante, y que se subdivide, según los diferentes matizados, en indio joco, indio cenizo, indio amarillo, etc.
El indio es el color más noble y preferible, la pinta, según dicen los galleros. En los indios han sobresalido muchos campeones famosos, y son , generalmente, gallos valerosos, agresivos, fogosos que no cejan nunca, ni se rinden fácilmente.
PINTO, FLOREADO. Es el matizado de diversos colores, principalmente en blanco y negro, y se distingue por el color dominante, como pinto negro, pinto blanco, pinto amarillo, etc. A cierto matiz de pinto negro le llaman “primavera”, lo mismo que a algunos pintos blancos le dicen “habichuela” o “afrijolados”.
MALATOBO. De color almagrado claro, con las alas mas obscuras y algunas plumas negras en la pechuga. Existe una variedad grande malatobos.
CANELO. Es el pintado en cenizo y blanco, cenizo y negro, y otras combinaciones de dos o más colores con un color donante.
GIRO. Es el matizado en amarillo o en blanco y negro, con distintas denominaciones asegura matices.
JABADO. De color blanco, pintado en pardo y amarillo o negro. Es la pinta mas desacreditada, porque supone un origen bastardo. Es raro encontrar un galo jabado valiente. Pero en los anales gallísticos nacionales figuran proezas realizadas por algunos jabados excepcionales, que han pasado a la posteridad.
TALISAYO. De color indio con plumas amarillas en las alas y el cuerpo, y negra la pechuga, con diversas variaciones. Es la pinta fatal, según creencia empírica muy arraigada.
GUACHARACO. Es una variedad del indio, rojizo, con manchas negras, tirando a guacamayo.
Los nombres de los colores matizados son distintos en algunos países. Por ejemplo, en Puerto rico a los indios les dicen rubios y camagüeyes a los canelos.
Hay pintados indefinidos, que la fantasía popular denomina caprichosamente, usando nombres supuestos, como “calandria”, “flor de caña”, “pájaro bobo”, y otros, que a veces no significan nada, y son mas bien motes.
Algunos gallos cambian el color de las plumas de un año para otro. Se han visto gallos completamente blancos tornarse negros, o viceversa, en el tiempo de la muda de las plumas. Entre los campesinos existe l acreencia de que esta transformación prodigiosa se realiza solamente en los gallos nacidos durante el mes de marzo, a los que llaman “marzales”. Pero se ha comprobado que este fenómeno tiene efecto en los galos de calidad absoluta, por lo que se cree que es una señal inequívoca de noble abolengo. Ningún gallo manilo cambia el color de la pluma, y nunca se ha visto huir en la pelea a un gallo “marzal”.
Gallos y Galleros. Ilustración Guillo Pérez. Sociedad de Bibliófilos Dominicanos.1985.
alguien se hara famoso publicando un fotoestudio en colores donde se detallen los colores con sus variaciones de los gallos de combate , yo compraria uno,la simple descripcion verbal no es sufuciente
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Me parecio importante esta ilustracion
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