Sonia Perozo
Nuestro
objetivo como país debería ser ¡que no haya una más!
Recibí tu llamada para informarme que ella había
vuelto con su agresor. Estabas perplejo y no comprendías como ella que ha sido
maltratada por tantos años ahora que tenía la oportunidad de dejar atrás tanto
dolor, decide dar otra oportunidad.
Te tuve que explicar que cuando ella hace eso
está respondiendo a una historia muy vieja que se llama condicionamiento
cultural, que le dice que los hombres son así, que él tuvo unos días muy
difíciles y debe comprenderlo y apoyarlo, que el que no es cojo es manco y lo
que le dijo su suegra "eso pasa en todos los matrimonios", "él
no es el primero ni el último que lo hace"...y quizás ella venga de una
historia familiar similar.
NO LA DEJES SOLA porque este comportamiento es
cíclico, ella hoy cree y "quiere creer" que no habrá una próxima vez.
Él comenzará a acumular rabia, frustraciones e inseguridades que va a descargar
en ella y comienza el ciclo de nuevo: la ofende, la insulta, la humilla hasta
que un día vuelve a levantarle la mano, para someterla o MATARLA.
NO LA DEJES SOLA que ella volverá a necesitar
apoyo, unas manos que la sostengan, un oído que escuche su historia y la crea,
una voz de aliento hasta que comprenda que esa no es la vida que soñó.
NO LA DEJES SOLA pero respeta su decisión hasta
que ella encuentre el camino de vivir sin miedo.
NO LA DEJES SOLA y cuando te vuelva a llamar, sin
juzgarla, dile que necesita ayuda terapéutica con especialistas en violencia, para
volver del camino de la muerte.
Luego de concluir este escrito leí con pena e
indignación el caso de la joven embarazada que fue asesinada por su padrastro. Al parecer la
madre ya había puesto un par de denuncias,
¿ven la importancia de no dejarlas solas?
O el caso de otra que luego de algunos días
detenido tan pronto fue puesto en libertad, salió a buscarla para matarla y así lo hizo. ¿Ven
la importancia de no dejarlas solas?
Si el protocolo fuera una realidad y sobre
todo si se aplicara, la cifra no fuera tan alta cada año.
Ciertamente Sonia, hay que escuchar, preguntar y apoyar más.
ResponderEliminarA la vez que se debe juzgar, criticar y aconsejar menos.