jueves, 11 de febrero de 2021

SUBRAYANDO LOS CULTIVOS DEL CONUCO / CARL ORTWIN SAUER

 



Los campos estaban principalmente dedicados al cultivo de plantas de raíz que proporcionaban almidón para la dieta aborigen. Todas se reproducían de manera vegetativa, principalmente por corte de tallos, como el caso de la yuca y el boniato. Todas eran cultígenas y dependían del hombre para su propagación. LA mayor parte de nuestra información procede de la Española. Las primeras noticias se encuentran en el Diario de Colon y son por ello de especial importancia. Como el Almirante había estado en la costa de África y había visito allí  raíces de  uso similar, pero no conocía las plantas  que las producían, las llamo ¨niames¨ (escrito de varias maneras), nombre por el que conocía los verdaderos ñames (Dioscoreas) de África. En general, se refirió a la yuca con el nombre de ñame, pero también al camote o boniano.

La yuca es insuperada y quizás inigualada en su rendimiento de almidón. Las Casas, que se había dedicado a su plantación comercia, dice que en muchos casos mil montones  (menos de media hectárea de tierra cultivada) podían producir entre ciento cincuenta y ciento setenta y cinco cargas de pan de cazabe, siendo cada carga de dos arrobas; es decir, más de 40 kg, y que una carga era suficiente amento para una persona durante un mes. Las raíces venenosas se rallaban para dejar escurrir perfectamente el zumo, y luego se cocinaban en una especie de panes planos, en un  procedimiento común a toda la zona tropical americana. Este pan es sabroso y nutritivo, y puede guardarse sin que se deteriore durante meses, incluso en un clima cálido y húmedo. La yuca dulce no venenosa se preparaba hirviéndola directamente, y a veces  asándola. Ambas especies todavía se cultivan mucho. La planta es indiferente a terrenos ácidos y en cierta medida alcalina, y algunas formas son notablemente resistentes a la sequía. Todavía comparte con el plátano el primer lugar en cuanto al suministro de alimentos en buena parte del Caribe y en otras partes  de los trópicos americanos. El comercio moderno, organizado para la cosecha, el almacenamiento y el procesamiento masivos, la han relegado.

El segundo ligar en importancia lo ocupaba el camote. De rendimiento menor que el de la yuca, tiene la ventaja de producir una cosecha al cabo de cuatro meses, cubriendo el suelo con sus tallos y hojas, y además, las de tener un sabor distinto del de la yuca y suministrar hojas que, según Las Casas, se asemejan una vez cocida a la espinaca. Las especies azucaradas se llamaban ¨batatas¨; las que no eran dulces, ¨aje¨ (aje, axe, asse). Los españoles aprendieron pronto a estimar la batata por su dulzura y a prepararla en conserva como se hace hasta hoy.

Otras plantas menores cultivadas por sus raíces han sido descritas por Oviedo y citadas con frecuencia en la literatura moderna. Todavía pueden encontrase aquí y allá como cultivos menores, La yautía (Xanthosoma) sigue siendo popular en Puerto rico. El ararú (Maranta), el llerén (Calathea allouia), el yampé (Discorea trifida) y la caña de raíz comestible se encuentran corrientemente hoy en los huertos familiares. El cacahuate o maní fue conocido por primera vez por los europeos en las Antillas, y formaba parte de la combinación de cultivos del conuco.

Acerca del maíz, escribe; ¨es un grano  de muy alto rendimiento, del tamaño del lupino (el lupino blanco cultivado del Mediterráneo) redondo como un chícharo (cicer) y da una harina en polvo muy fina (tenuissimo polline); se muele como el trigo (frumentum) y da un pan de buen sabor; muchos mascan las semillas cuando quieren alimentarse. Esta afirmación puede referirse a granos tostados, como en el comentario de Oviedo. Coma describe un maíz grande y de granos redondos que se molía en haría y se cocía en panes. Esto indica un maíz harinoso, igual que la alba endosperma de Pedro Mártir. Ambas descripciones concuerdan con un tipo de maíz utilizado para molerlo o asarlo.

Los frijoles y la cucurbitácea que generalmente se cultivan junto con el maíz son mencionados simplemente en cuanto a su presencia.

Los indígenas utilizaban ampliamente recipientes de calabaza, probablemente Crescentia. La Cucúrbita moschata, que es la que con más probabilidad se hallaba presente, tiene un nombre arahuaco: auyama, que fue, sin embargo, agregado al español vernáculo en Tierra Firme.

Miscelánea de plantas de jardín.

En el desembarco del 12 de octubre aparecieron loros, algodón hilado en bolas y lanzas como presentes. Colon se refirió repetidas veces al algodón en la Bahamas, Cuba y La Española.

Así fueron rápidamente descubiertos el tabaco y la bixa. La bixa o bija proporcionaba la pintura rja para el cuerpo que posiblemente dio origen a la definición de los indios rojos.

El algodón, la bija y el tabaco no se plantaban en s montones de los conucos, y no existen descripciones de donde o como se cultivaba.

El algodón, importante en todas partes, era cultivado más extensivamente en la provincia de Xaragua y en Jamaica. Repetidamente se registra que crece salvaje, lo que pareciera indicar que escapaba del cultivo.

Un colorante vegetal negro utilizado para penarse el cuerpo se extraía del fruto comestible de la jagua (Genipa), elegante árbol de madera dura que todavía se común alrededor de las zonas habitadas.

La cohoba (Piptadenia peregrina), utilizada como polvo narcótico inhalable, mezclada con tabaco, fue a no dudar introducida desde Sudamérica.

El elemento más extraño son las manzanillas, nombre latinoamericano que en la actualidad se usa popularmente para designar una variedad de plantas sin relación entre si y cuyos frutos, si existen, pueden no tener semana alguna con la manzana.

Las Casas dice claramente que, a diferencia de Tierra Firme, en la Española no había ¨huertas¨; hasta la piña, en su opinión, la habían traído los españoles de Puerto Rico.

Los caribes isleños cultivaban piñas para hacer vino, que no utilizaba en el norte. Los ajíes, pimientos o chiles, eran el condimento corriente; Las Casas describe dos tipos domésticos y un tercero silvestre. Uno de los ajíes cultivados era rojo, alargado y en forma de dedo; el segundo era redondo como una cereza y más picante; el silvestre tenia frutos pequeños.

Para las muchísimas plantas de cultivo que no encajaban en los montones de los conucos se necesitaban otros lugares. El tabaco debe hacer sido cultivado en canteros especiales. Árboles y arbustos se cuidaban cerca de las casas, y a falta de mejor nombre, les llamό plantas de jardín.

Aun cuando los indios fueron eliminados muy pronto, sus plantas han sobrevivido; el calabacero con sus frutos enormes, los arbustos de bija, el algodón de tallo leñoso y el mamey.

Las plantas de jardín de la población constituyen un registro ignorado de pasadas condiciones y conexiones culturales.

Descubrimiento y Dominación Española del Caribe.1966. Capítulo III. Situación Aborigen de las islas. Pág.87.Socidad Dominicana de Bibliófilos. 1994.

 

 


domingo, 7 de febrero de 2021

INSTRUCCIÓN PÚBLICA (1906). JOSÉ RAMÓN LÓPEZ.




La instrucción pública gratuita esa profusamente difundida en la población urbana del país y comienza a penetrar en la rural.

Los ayuntamientos costean la instrucción primaria. El estado la secundaria y la superior.

Todavía la República no ha escogido un plan definitivo de enseñanza o que, por lo menos, parezca destinado a durar mucho tiempo.

El estado intelectual del país al independizarse era muy deficiente. Sucedieron después frecuentes guerras civiles, trastornos de todo género que ocupaban por completo el espíritu de un pueblo sin práctica y sin conocimientos de gobierno.

Durante ese lapso, la instrucción adelantó muy poco. En todo el país no contaba con más que un Apóstol esclarecido, Monseñor de Meriño, actual Arzobispo de Santo domingo, y su múltiple labor civilizadora le  restaba tempo que el exigía la enseñanza. Después lego el eminente educacionista Eugenio María de Hostos y, delicado exclusivamente a la labor educativa, creo las escuelas normales y de ellas se está proveyendo el país de numeroso elemento para el profesorado.

No parece definitivo el plan de enseñanza vigente ahora porque la proporción entre el elemento intelectual formado y el procedente de la institución primaria, es excesivo. Se forma un gran exceso de intelectuales.

Pero, por ahora, el mal es un bien. En circunstancias normales el exceso de intelectuales se convertirá en clase parasitaria, o tendría que emigrar del país. En las circunstancias actuales, siendo necesaria una constante expansión de la enseñanza, hasta llevarla a los lugares más apartados del país, todos los profesores pueden encontrar empleo a sus aptitudes. No es, pues, presumible que ene estos años se desequilibre la proporción establecida en el desarrollo de los diferentes grados de intelectualidad.

En las escuelas públicas gratuitas el método es uniforme. En las privadas la enseñanza es libe, así como el método que prefieran.

La Dirección de la enseñanza, su inspección, su administración, su autoridad, están confiadas:

Al ministro de Justicia e Instrucción Pública;

A la Junta Directiva e Instrucción Pública, con su asiento en la ciudad capital;

Al Director general de enseñanza Norma;

A las Juntas Provinciales de Estudios, establecidas en las ciudades cabeceras de provincia o de Distrito, y subordinadas a la Junta Digresiva de Estudios;

A las Comisiones locales de estudios, que funcionan en las Comunes que no son capitales de Provincia o de Distrito, Comisiones que dependen de las Juntas Provinciales.

A los inspectores de escuelas, nombrados por las Juntas Provinciales en cada cabecera en que ellas residen.

La enseñanza superior y técnica la difunden el Instituto Profesional, la Escuela de Bachilleres y el seminario Conciliar, establecidos en la capital, y las Escuelas Normales y Colegios Superiores que funcionan en toda las cabeceras de Provincias y de Distritos.

Las Escuelas Normales dispensan la enseñanza y expiden títulos de maestro de segunda enseñanza y maestro normal (el equivalente al bachillerato).

La Escuela de bachilleres expide títulos de Bachiller.

El Seminario Conciliar, fundado en 848, prepara para la carrera eclesiástica y para la obtención, mediante el examen correspondiente, del título de Bachiller.

El Instituto Profesional enseña y expide títulos de Licenciado para las carreras de abogado, medico, farmacéutico, cirujano dentista y agrimensor.

Las Escuelas Normales tienen cursos prácticos y cursos teóricos y expiden, a los alumnos que terminan los últimos, títulos de maestros de segunda enseñanza y de maestros normales.

La instrucción primaria la costean los Municipios. La secundaria y la superior son costeadas por el estado, siendo su principal recurso una parte del impuesto de patentes de comercio y de industrias.

El Número de alumnos en las escuelas de la República pasa de siete mil, numero relativamente escaso  si se tiene en cuenta la población del país; pero hay que tener en cuenta que aquella es muy rala, está diseminada de tal manera que no hay veinticinco habitantes por kilómetro cuadrado, de manera que si bien es posible, y se realiza, proporcionar instrucción a todos los niños urbanos, muchos, de los rurales que viven muy lejos de las ciudades carecen de ella todavía, y sόlo reciben la educación doméstica, de excelentes virtudes que ha permitido que la población analfabeta jamás se señale como autora de crímenes horrorosos, ni como notable transgresora del código moral.

LA REPUBLICA DOMINICANA. 1906. Pág. 77. José Ramón López. Sociedad Dominicana de Bibliófilos Inc. 1996.